En este blog se permite fumar, aunque recomiendo no hacerlo en agradecimiento a una excelente homeópata a la que debo mucho. Se prohibirá terminantemente el día en que desaparezcan las armas atómicas, las centrales nucleares y sus residuos, la contaminación, la desertización y la pederastia. ¡Ah!, se me olvidaba, también se pueden dejar comentarios.

lunes, 7 de diciembre de 2009

Aminetu Haidar y los intereses creados


La situación de la activista saharaui Aminetu Haidar me recuerda, salvando las distancias, el caso de la también defensora de los derechos de su pueblo, Birmania, Aung San Suu Kyi.
Se hace muy cuesta arriba creer en la democracia hoy en día. El gobierno del pueblo y para el pueblo es una buena idea que, tristemente, suele cristalizar en el gobierno de ciertos partidos políticos -que se dicen elegidos por el pueblo- sobre el resto de los ciudadanos de a pie. Además, en política, por muchas vueltas que se le dé y por mucho que se maree la perdiz, todas las decisiones son tomadas por motivos económicos. Todas las guerras, probablemente, han tenido su origen en intereses económicos, y no hay más que revisar la Historia.
No es éste lugar ni momento para entrar en profundos debates sobre la consistencia democrática de Marruecos, España o terceros países, pero resulta evidente que la señora Aminetu Haidar es una pelota de ping-pong más en el largo partido "amistoso" que disputan España y Marruecos desde que la primera abandonó el Sáhara Occidental. No soy experto en política internacional, pero -como siempre digo- tampoco soy idiota, y tengo muy claro, después de todos estos años de "fraternas relaciones con Marruecos", que para lograr algo del "país hermano" siempre hay que pasar por taquilla y pagar religiosamente. Lo que no es mejor ni peor: las relaciones internacionales -la política internacional- se establecen, como antes he dicho, en base a los intereses económicos, y no hay más cáscaras. Si no, que le pregunten al señor Bush por los democráticos motivos que le llevaron a derrocar al tirano Sadam Hussein.
Aminetu Haidar no quiere el pasaporte español, lo que es lógico porque ello supondría volver a su país como una extranjera. Tampoco quiere pedir perdón a Marruecos, porque en rigor serían las autoridades de este país quienes tendrían que ofrecer excusas por este asunto y por otros muchos pendientes.
¿Qué sucederá, pues...?
¡Vaya usted a saber!
Como la economía es el motor de nuestra Sociedad, no me extrañaría nada que la señora Haidar dé con sus huesos en la tumba, y aquí paz y después gloria. Saramago dijo algo así como que sería una vergüenza dejarla morir, pero teniendo en cuenta el refrán español de "Al burro muerto, la cebada al rabo", para España y Marruecos sería la mejor solución: cuatro días de protestas y manifestaciones, y todo solucionado.
¡Coño!, pero si se cargaron a Ghandi, a Luther King y a Kennedy, y no pasó nada.

4 comentarios:

  1. Si los gringos tiraron las torres gemelas por motivos económicos convenciendo a tol mundo que fué Binladen, y ya, aprovecharon la coyuntura para invadir otro país por razones de dineros, ¿por que no dejar que se muera un personajillo cualquiera?

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  2. Dices cada cosa... Cualquiera que te lea se va a creer que es cierto, ¡je! ¡Ay, Dios mío...! Un abrazo.

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  3. Ay Jose luis, si me dices cuanto vale el pueblo saharui, te digo yo lo que valen los huesos de la sra. Aminetu, te dire cuanto valen sus ideas y sus principios y sus sentimientos y sobre todo te dire lo que vale un pasaporte de planetario ??? sabes, el planetario real, como ella como yo, como tu, bueno, ese para registrarte con nombres y apellidos, asi: Planetario Terricola, solo que el segundo apellido, eso es otra cosa, hay que especificar bien pero bien clarito, un numero ordinario, y tan ordinario...Tercermundista, Copromundista...eso lo cambia todo. Por eso no se dan, por eso la Sra. Haidar no tiene, se lo quitan, no se lo dan, que es lo mismo pero no es igual porque por ello, estoy casi seguro que ahorita me voy a preparar unas bellas flores, las mas hermosas para honrar la memoria de una gran mujer.
    !Maldita la hora de estar pensando en flores!

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  4. Querida María del Carmen, los que poco podemos hacer en estos asuntos, no hacemos nada mal en utilizar las flores como un sencillo homenaje, a la vez que como un grito contra la injusticia que asola este demencial planeta. Un abrazo.

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