En este blog se permite fumar, aunque recomiendo no hacerlo en agradecimiento a una excelente homeópata a la que debo mucho. Se prohibirá terminantemente el día en que desaparezcan las armas atómicas, las centrales nucleares y sus residuos, la contaminación, la desertización y la pederastia. ¡Ah!, se me olvidaba, también se pueden dejar comentarios.

martes, 23 de febrero de 2010

El apóstol de los "ménages á trois"

Mi difunto padre tenía un dicho que viene como anillo al dedo para centrar este delicado asunto: "Está el tiempo mentecato; anda la sardina detrás del gato". Cierto es que también podríamos utilizar aquél de "Consejos vendo, y para mí no los tengo", y hasta "Una cosa es predicar, y otra dar trigo", aunque probablemente el más adecuado, el absolutamente válido, sea el que nos dejó el Cristo: "Amaos los unos a los otros como yo os he amado". Sin bromas. Como debe ser. Aunque nos cueste un huevo y la yema del otro practicarlo.
Parece ser que el padre Samuel Martín, párroco de las poblaciones toledanas de Noez y Totanés, se ha gastado unos 17.000 euros que pertenecían a las cofradías de Semana Santa, en llamadas a líneas eróticas y páginas pornográficas de Internet. Además, este buen pastor ofrecía sus servicios como macho ibérico por medio del siguiente anuncio en la Red: "Héctor; hombre heterosexual para mujeres y parejas. 30 años. En Toledo capital. Fotos reales. Bien dotado (15 cm) para tu placer y felicidad. 15 minutos 50 euros, 30 minutos 75 y una hora 120 euros. Estoy abierto a todo excepto al sado. Hoteles y domicilios. 24 horas"
Menos mal que las monjitas de clausura no se enterarán de estas cosas...
¡Hombre!, hay que reconocer que la carne es débil y el pescado caro. No seré yo quien tire la primera piedra, ni mucho menos, porque aunque madurete todavía me gusta echar una canita al aire de vez en cuando, y hasta reconozco (mea culpa) un cierto disfrute con el cine porno (si la película es buena, mucho) Pero, ¡coño!, yo no soy sacerdote católico, ni párroco de dos pueblos, ni me ofrezco en Internet para formar tríos, ni les he levantado a los colegas 17.000 euros.
Mentiría al decir que soy agnóstico, sin embargo no lo hago al manifestar que el único líder religioso que me merece un profundo respeto es el Dalai Lama. Así de claro. Por lo tanto, estos asuntos no me influyen en absoluto, porque tengo por cierto que los hombres somos capaces de las máximas heroicidades y de las más terribles villanías. Errar es de humanos, y el padre Martín es humano hasta los tuétanos, evidentemente. Así que si devuelve la tela (él o quien sea), se disculpa y se dedica al sexo como profesional en lugar de a confesar beatas, por lo que a mí respecta aquí no ha pasado nada.
De lo malo malo, prefiero un cura apóstol del ménage á trois y profesional del sexo, antes que un pederasta traicionero escondido en un confesionario.


4 comentarios:

  1. Y bueno, en estos tiempos donde la Iglesia está desmoronándose a causa de algunos de sus miembros, ya no es de extrañarse conductas desvergonzadas como la de este padrecito. Y ni te creas que las monjitas cuidan sus habitos, no, no, acordate que la carne es carne y también hay religiosas de apariencia. Ni modo, la fe, paga.

    ¿será que el placer carnal se disfruta más ocultándose tras los hábitos?

    Es una pena por los miles de fieles que aún creen en la Iglesia.

    Buen tema Joe.
    Besos.

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  2. No puedo creer eso que dices, Liz. Pase lo del padre Martín, pero lo de las monjitas... No creo que las monjitas tengan carne; como mucho, tofu. ¡Oye!, y que puede que tengas razón con lo de los hábitos. Esta noche me voy a presentar ante mi mujer vestido de cisterciense, a ver qué pasa. Vete buscándome alojamiento, por si acaso. Un abrazo.

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  3. Pues habrá que ponerse alzacuello y tanga de color negro con ribete blanco, a ver si funciona.

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  4. No te hagas ilusiones, Mexiñol, que hay mucha competencia en ambos bandos (predicadores y sexo)

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