En este blog se permite fumar, aunque recomiendo no hacerlo en agradecimiento a una excelente homeópata a la que debo mucho. Se prohibirá terminantemente el día en que desaparezcan las armas atómicas, las centrales nucleares y sus residuos, la contaminación, la desertización y la pederastia. ¡Ah!, se me olvidaba, también se pueden dejar comentarios.

martes, 2 de marzo de 2010

Cosas de los periodistas

Parece ser que en Moscú cayó, hace una semana, una de las mayores nevadas de los últimos años, y las autoridades tuvieron que utilizar todos los medios a su alcance (de los que, por lo visto, están bien dotados) para limpiar la ciudad, desplazando más de 400.000 metros cúbicos de nieve.
Hace unos minutos escuchaba yo Radio Nacional de España, y me he quedado muy sorprendido cuando uno de los comentaristas ha dicho algo parecido a esto: "Qué pena, ¿verdad? Podían transportar toda esa nieve a países que verdaderamente tienen necesidad de agua. ¿No se le habrá ocurrido a nadie la idea?" ¡Hombre!, a más de uno; estoy bien seguro. El problema radica en que los países que necesitan agua, no pueden pagarla: si no hay dinero, no hay agua. ¡El negocio es el negocio, tíos!
Como guinda del pastel, a continuación, en la página deportiva, uno de los realizadores del programa, que hablaba sobre el posible traspaso de no sé qué jugador a no sé qué equipo (ni me importa), ha soltado la siguiente sentencia lapidaria: "Cuando el río suena, es que alguien llama a la puerta"
Sin comentarios.

6 comentarios:

  1. Te van a dar el agua !!!, no dan la leche que derraman, cuando protestan los tamberos.
    Es una pena, pero así es el mundo en el que vivimos, prima el egoismo.
    Un abrazo, Joe

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  2. Uff, no quieras ver a los periodistas locales de Monterrey, yo no se como se atreven a salir en la tele si no saben hablar.

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  3. Y que lo digas, Gus; además, ya se sabe: al enemigo, ni agua. Y como el resto de la gente es nuestro enemigo particular. Pues eso...

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  4. Pues no sé qué les enseñan en la Universidad, Mexiñol. La cuestión, ¡ay, Dios!, siempre es la misma: ¿quién enseña al maestro? Claro, de tales maestros, tales discípulos. No hay cojones.

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  5. Yo ni afirmo ni confirmo nada, todo lo contrario... por eso cuando digo una cosa digo otra, es que es como todo, hay cosas que ni qué ¿tengo o no tengo razon?

    ¿vos crees que me darían trabajo en esa radio? =D

    Esto de los medriocres es generalizado mi amigo, qué le vamos hacer.

    Besitos

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  6. Estás contratada, Liz. Lo has hecho mucho mejor que muchos que llevan ya tiempo en la profesión.
    Un abrazo.

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