No me cuesta esfuerzo alguno expresar, de todo corazón, este deseo; es más, me reconforta sobremanera:
¡Feliz cumpleaños, señor Mandela!
¡Feliz cumpleaños, Madiba!
Usted me ha enseñado, entre otras cosas, a comprender el significado de la palabra utopía.
Utopía es intentar conseguir que el resto de los políticos de esta puta sociedad se le parezcan, aunque sea en la suela de los zapatos.
Reciba, Madiba, el abrazo respetuoso de este blanco gilipollas, que ruega humildemente al Señor por usted, y porque nos envíe todos los años cinco o seis líderes que se le parezcan, a ver si salimos de este agujero negro de una puñetera vez.
Adhierolenamente a tus deseos, mi querido amigo, que así sea.
ResponderEliminarPD: Anduve medio perdido los días que estuvo mi hija por aca y ahora ando perdido sin ella, sabrás entender mis generales ausencias.
Es lo que le digo yo a la mía cuando les acompaño al aeropuerto, "qué tranquilo me quedo y cuánto os voy a echar de menos"
ResponderEliminarNada, las cosas son como son, Gus; nuestra vida es nuestra, y la de ellos suya, y no hay que darle vueltas. Un abrazote.
Cuánta razón querido amigo, cuántos políticos como Mandela nos harían falta!...
ResponderEliminarAdmiro a este hombre desde que supe de su lucha, no recuerdo cuánto tiempo ha pasado, también celebré su cumpleaños, ojalá nos viva muchos años.
Un fuerte abrazo!