En este blog se permite fumar, aunque recomiendo no hacerlo en agradecimiento a una excelente homeópata a la que debo mucho. Se prohibirá terminantemente el día en que desaparezcan las armas atómicas, las centrales nucleares y sus residuos, la contaminación, la desertización y la pederastia. ¡Ah!, se me olvidaba, también se pueden dejar comentarios.

domingo, 9 de febrero de 2025

"El 47", "El caballero del dragón" y el cine actual

 Nunca pretendí ganarme la vida como crítico cinematográfico, y hoy, ya jubilado, mucho menos, pero sí que de vez en cuando siento la invencible tentación de comentar algunas cosillas de esto que antaño fue denominado "El Séptimo Arte" y que hoy en día ni se sabe qué es, sobre todo cuando constato fenómenos que -a mi juicio- resultan sorprendentes. Remarco "a mi juicio", porque es lógico que como en cualquier manifestación unos estén a favor y otros en contra. Yo, después de 70 años viendo cine, un cine cuyos principales pilares eran guión, interpretación, dirección, fotografía, banda sonora y montaje, me sorprendo con las películas que nos ofrecen actualmente, que parecen rodadas de seguido con un molinillo de café pegado a una lente, y en las que los actores no saben ni vocalizar sus frases, ante la pasmosa impasibilidad del director.
Todo esto viene a cuento de los cinco Goyas que ha recibido la película "El 47", que tuve el gusto de ver hace algunas semanas sin que me causara el menor impacto. La historia del barrio de Torre Baró, surgiendo desde el chabolismo más profundo hasta convertirse en una zona residencial a falta de autobús, pasó ante mis ojos sin pena ni gloria porque carecía de garra para atrapar al espectador. Y es que al espectador tiene que engancharle la peli, no las críticas oficiales ni los premios. Una película es como una novela: o te atrapa o es un tocho. No digo con esto que "El 47" sea un tocho, pero estoy seguro de que podría ser claramente mejorable. En cine, como en literatura, de una historia sencilla se puede hacer una gran obra, y de una gran historia se puede hacer una porquería. "El 47" no es una porquería, pero en 1960 Billy Wilder dirigió "El apartamento", con Jack Lemmon y Shirley MacLaine, desarrollando un tema bien sencillo al que llevó por un sendero sencillo a la más sencilla de las sublimaciones. En definitiva: creo que "El 47" habría necesitado más fuerza, más vigor narrativo. Pero allá vosotros.

Mientras todo esto sucedía (je, je), cayó ante mis ojos una entrevista que le hicieron al director español Fernando Colomo, quien confesó que el rodaje de su película "El caballero del dragón" (1985) le había dejado una deuda de 50 millones de pesetas y un R-5. Yo recordaba la peli, pero después de los años sólo tenía claro que trataba de un extraterrestre (Miguel Bosé) que llega a nuestro planeta en plena Edad Media. Pronto y bien mandado localicé el filme en cuestión, me armé de paciencia y me lo salté dispuesto a todo. Oigan, pues la película está bien, qué caramba. Harvey Keitel, Klaus Kinski y el mismo Bosé lo hacen muy bien. Quizá Colomo se pasa con los toques de humor en algunos momentos y en otros alarga un poquito las situaciones, pero el resultado es una película de ciencia-ficción muy digna... que no tuvo éxito y ahora empieza a ser considerada eso que llaman "una obra de culto". Claro, mientras en Estados Unidos tenían el culo pelado de rodar ciencia-ficción (la mayor parte de clase B, pero bueno), aquí veníamos de "Recluta con niño", "Ahí va otro recluta", "Cateto a babor", Esteso y Pajares, y así les fue como les fue a la película y a Colomo. ¿Podría alguien repetir la experiencia en la actualidad?
Ésa es una cuestión que nos mete de lleno en campo minado, y a mí esas cosas me dan mucho miedo porque explotan. Tengo la impresión de que hoy en día faltan buenos guiones, buenos actores y buenos directores, y proliferan las temáticas sociales bañadas en sexo; se ruedan películas como churros, pero te vuelves loco para disfrutar con una; tiros, explosiones y coches volando por todos lados, o miradas lánguidas, pechos al aire y silencios prolongados que te llegan a aburrir. ¿Dónde están los buenos guiones? ¿Cuál es el futuro del cine?
Y yo qué sé.



domingo, 2 de febrero de 2025

sábado, 1 de febrero de 2025