LAS HAYAS DE LEGAIRE
Al borde del camino de Navarra,
muy cerca de las campas de Legaire,
donde frío y veloz recorre el aire
el rocoso perfil de la montaña,
hay dos hayas gigantes bien formadas,
frondosas y elegantes que, al desgaire,
situadas frente a frente con donaire,
vigilan al que cruza su enramada.
A pleno Sol hermosas me parecen;
simpáticas y nobles compañeras
que el paisaje completan y enaltecen,
pero a la tenue luz de las estrellas
son dos enormes monstruos que protegen
el oscuro sendero bajo ellas.
¡Refuerce su corazón el caminante
que siga aquella senda!
Con tu clara y sensible descripción poética, me has puesto en situación y desearía caminar por esa senda, aun sin reforzar el corazón y consciente de sus consecuencias.
ResponderEliminarUn abrazo enarbolado
Pues anímate. Cuando más bonito está el bosque es entre Junio y Septiembre. Así que aquí te espero. Un abrazo.
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